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Pasaportes falsos permiten a miembros de ISIS entrar en Europa y EEUU

The Guardian – Vera Mironova y Bethan McKernan – 3 enero 2022 – Traducido por Rojava Azadi Madrid

El vendedor cuyos pasaportes han sido utilizados por quienes cruzaron ilegalmente la frontera siria dice: ‘No es mi trabajo ver quién es malo’

Una floreciente industria online especializada en pasaportes falsos con visados oficiales y sellos de viaje está ofreciendo a personas vinculadas al Estado Islámico la oportunidad de salir de Siria y viajar a Reino Unido, la UE, Canadá y Estados Unidos, según ha descubierto una investigación de The Guardian.

Una de estas redes, dirigida por un uzbeko con vínculos extremistas que vive en Turquía, está vendiendo pasaportes falsos de alta calidad por hasta 15.000 dólares (11.132 libras esterlinas) haciéndose pasar por de varios países. En al menos 10 casos de los que tiene conocimiento The Guardian, personas que cruzaron ilegalmente la frontera siria hacia Turquía han utilizado sus productos para salir por el aeropuerto de Estambul.

Los vendedores afirman que la UE es el destino más popular, pero también que en al menos dos casos las personas pudieron viajar desde Estambul a México con pasaportes rusos falsos y, desde allí, cruzar ilegalmente la frontera hacia Estados Unidos. Níger y Mauritania también son destinos populares, así como Ucrania y Afganistán.

El negocio del uzbeko va tan bien que recientemente ha abierto un nuevo canal en la aplicación de mensajería cifrada Telegram con el nombre oficial de «Istanbul Global Consulting». El creciente comercio sugiere que peligrosos extremistas podrían estar pasando por debajo del radar de los servicios de seguridad de todo el mundo, escapando de la justicia por crímenes pasados y pudiendo continuar la actividad terrorista en otros países además de Siria.

«No pregunto con qué grupo está alguien. Estoy dispuesto a trabajar con cualquiera», dijo el uzbeko en un chat con The Guardian, que se hizo pasar por un cliente interesado. «No es mi trabajo ver quién es malo y quién no. Los servicios de seguridad deben ocuparse de ello».

Funcionarios de seguridad occidentales advirtieron en 2015 que ISIS había logrado obtener un importante equipamiento, como libretas de pasaportes en blanco e impresoras para fabricar pasaportes sirios e iraquíes, que utilizaba para camuflar operativos entre el más de un millón de personas que huyeron a Europa durante el pico de la crisis de los refugiados. ISIS reivindicó poco después varios atentados en todo el continente, entre ellos el de noviembre de 2015 en el teatro Bataclan de París y el del Manchester Arena en 2017.

Desde entonces, las agencias fronterizas europeas han invertido en tecnología y formación del personal para identificar mejor los pasaportes falsos. En 2020, Tayikistán revisó por completo su personal consular en Estambul y su sistema de documentos en un intento de acabar con el uso de pasaportes tayikos falsos.

Pero en respuesta, los vendedores de pasaportes falsos también han mejorado su juego, utilizando una mayor variedad de nacionalidades para los posibles clientes.

El uzbeko envió varios vídeos de sus productos, entre los que se incluyen nuevos pasaportes franceses, belgas, búlgaros y rusos que parecen tener marcas de agua y hologramas de seguridad auténticos.

Cuando se colocan bajo una luz negra, dos pasaportes rusos contienen materiales sensibles a los rayos ultravioleta diseñados para impedir la falsificación de pasaportes, y un pasaporte belga colocado en un escáner similar a los utilizados en los aeropuertos parece leerse correctamente, apareciendo los datos del titular en el monitor.

Pasaportes falsos suministrados por un vendedor uzbeko que permiten a los miembros del ISIS entrar en Europa y Estados Unidos – vídeo

Según los vendedores de documentos, es imposible falsificar un chip biométrico que funcione, pero en muchos pasos fronterizos los funcionarios que comprueban los pasaportes que no funcionan simplemente ignoran los que no funcionan y dejan pasar al titular del pasaporte.

«Hay un vendedor particular en Turquía que proporciona a los miembros del IS documentos de muy alto nivel [es decir, bien falsificados]», utilizando interlocutores que hablan ruso, árabe y otros idiomas para atender a diferentes clientes, dijo una fuente del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.

«Tenemos conocimiento de que miembros del IS utilizan estos pasaportes falsos para cruzar a Europa, y la seguridad europea no consigue detenerlos a todos».

Aunque el servicio más popular de los vendedores de documentos es el de proporcionar documentos a los combatientes extranjeros en Siria asociados al IS y a otros grupos armados para que viajen a Europa, el grupo también ha identificado nuevas áreas para expandirse.

En un chat de Telegram para personas en al-Hol, un campamento en el noreste de Siria que alberga a unas 60.000 mujeres y niños vinculados a ISIS, uno de los vendedores online de Uzbekistán, una mujer extranjera detenida en otro campamento cercano, ha publicado: «Si necesitas documentos falsos de Rusia, Asia Central, Turquía, Europa, DM me.»

La caída de Afganistán en manos de los talibanes también ha creado una nueva base de clientes de refugiados afganos en Turquía, afirma el uzbeko. Aunque sus servicios son demasiado caros para la mayoría de los afganos desplazados, afirma que sus clientes utilizan los pasaportes falsos para embarcar en vuelos a países occidentales, y luego solicitan asilo una vez que aterrizan.

Mientras que los combatientes de bajo rango de ISIS apenas tienen dinero para comprar un solo pasaporte, los miembros de alto nivel que quieren abandonar por completo la red suelen comprar varios documentos de diferentes países y los utilizan para desplazarse con frecuencia, cambiando de pasaporte en cada nuevo vuelo o traslado, dijo un vendedor de pasaportes ruso.

Un ciudadano ruso que luchó por ISIS hasta 2015 dijo: «Sólo tenía un par de cientos de dólares cuando llegué de Siria, así que compré el pasaporte más barato: un pasaporte tayiko de muy mala calidad. No funcionó y me detuvieron en el aeropuerto de Estambul.

«Entonces mi familia reunió suficiente dinero para comprar uno de mejor calidad. Así que conseguí un pasaporte ruso de verdad, pero con mi foto, y pude llegar a Ucrania con él. Una vez me paró la policía en Ucrania y me lo quitaron, pero me lo devolvieron una semana después diciendo que todo estaba bien. Por desgracia, este pasaporte está caducando ahora, así que estoy intentando conseguir dinero para comprar uno nuevo».

Para asegurarse de que una persona desaparece por completo, por 500 dólares el vendedor uzbeko puede incluso ofrecer un certificado de defunción turco que puede ser enviado al consulado de su país de origen. «A menos que seas Abu Bakr Baghdadi [El líder de ISIS, muerto en 2019] nadie iría a la morgue a comprobar si realmente has muerto. Simplemente aceptarían ese documento y lo introducirían en el sistema», dijo.

Hay varias opciones de pasaportes, según la etnia de los clientes, los idiomas que hablen, a dónde quieran ir y cuánto tengan que gastar. Los documentos más baratos para llegar a Europa son los pasaportes rusos, kirguisos y kazajos, que cuestan unos 5.000 ó 6.000 dólares como parte de un paquete de visados Schengen. Otras opciones populares y algo más caras son los documentos ucranianos y moldavos, que permiten viajar sin visado a la UE.

La opción más cara es el pasaporte de la UE, que cuesta 8.000 dólares, y que suelen solicitar los occidentales y árabes que hablan algo de francés y pueden pasar por franceses o belgas. Normalmente, un ciudadano de la UE llega a Turquía con su propio pasaporte, lo vende al uzbeko y a sus colegas por unos 2.500 euros, y luego se cambia la foto del pasaporte por la de un cliente. A continuación, el propietario original del pasaporte alega que lo ha perdido y solicita un reemplazo en su consulado en Estambul.

Los pasaportes se imprimen en sus países de origen y se llevan al país donde el cliente está esperando, donde reciben sellos oficiales de entrada en la frontera, lo que ayuda a consolidar la legitimidad del documento.

«El pasaporte en sí no cuesta relativamente nada. Lo que sí cuesta son los sellos», explica el vendedor ruso. «La mayor parte del dinero se destina a los sobornos para los sellos».

«Antes la calidad de los pasaportes en el mercado era mala, por lo que había un número limitado de países a los que se podía viajar desde Siria», dijo. «Ahora los pasaportes son de tan buena calidad que, si tienes suficiente dinero, puedes ir absolutamente a cualquier sitio».

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