Cristianos en Siria: de 2 millones a menos de 200 mil

Yeni Yasam Gazetesi – 18 diciembre 2024 – Traducido y editado por Rojava  Azadi Madrid

George Aslan, del Partido Demócrata, señaló que el número de cristianos en Siria ha descendido de dos millones antes del inicio de la guerra a unos cientos de miles.

El diputado del Partido de la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (Partido DEM) George Aslan tomó la palabra en el marco de la propuesta de ley presupuestaria del Gobierno central para 2025 que se está debatiendo en la Asamblea General del Parlamento.

Aslan señaló que la población cristiana está disminuyendo rápidamente debido a los conflictos en Siria. Refiriéndose al auge del extremismo religioso en los últimos años, Aslan declaró que estos grupos han llevado a cabo ataques armados y con bombas contra iglesias y cristianos, y que a los cristianos se les ha hecho imposible respirar debido a las prácticas discriminatorias.

Descenso de la población cristiana

Según Aslan, «Si bien los cristianos constituían más de la mitad de la población en Líbano, la situación se invirtió tras la guerra civil que asoló el país en 1975, y la población cristiana descendió a cerca del 30% debido a la guerra y los conflictos en curso». En Irak, la población asiria, siriaca y caldea era de aproximadamente 1,5 millones a principios de la década de 2000, pero tras la caída del régimen de Saddam en 2003, la población en el país se redujo a 400 mil debido a los ataques. Tras los atentados del ISIS, se calcula que esta población ha descendido a aproximadamente 200 mil».

Ejemplos de 2015

Hablando de los ataques y masacres contra cristianos en Siria, Aslan dijo: «Desde el comienzo de la guerra civil en Siria, la comunidad cristiana ha sufrido muchos daños como todos los demás pueblos del país. Si nos fijamos en la proporción y la pérdida de población, no sería exagerado decir que los cristianos son los que más han sufrido. La razón de todos estos ataques es tanto su fe como el hecho de que son más vulnerables que otros grupos. Desde el comienzo de la guerra civil en 2011, ISIS y otros grupos yihadistas similares han perpetrado numerosos atentados terroristas contra armenios, asirios y siriacos residentes en Siria. En febrero de 2015, ISIS llevó a cabo un bárbaro ataque terrorista contra decenas de pueblos asirios y siriacos a orillas del río Jabur, en Hasakah, y ocupó numerosas aldeas. Como consecuencia de estos ataques, muchas personas fueron masacradas y miles de personas se vieron obligadas a abandonar sus barrios.»

«Significa un desastre para todo el país»

Aslan afirmó que antes de la guerra civil vivían en Siria casi dos millones de cristianos, pero que ahora esta cifra se ha reducido a cientos de miles: «Nuestro pueblo en este país casi ha llegado al punto de la extinción». Tras los acontecimientos del último mes, con el colapso del gobierno de Assad, los cristianos, al igual que los alauitas, los drusos y otras confesiones diferentes, se encuentran en un estado de ansiedad e incertidumbre. Aunque HTS se ha reunido con los líderes religiosos de la comunidad cristiana y los ha tranquilizado, esta preocupación no es infundada, dado el pasado yihadista de HTS y sus prácticas sobre el terreno en cuanto tomó el poder. Los dirigentes de HTS han declarado que quieren gobernar el país bajo la sharia. Este entendimiento significa el desastre para las mujeres, los alevíes, los cristianos, los drusos y todo el país. No hace falta decir lo que significan las normas de la sharia»

Turquía debe respetar la voluntad del pueblo

Aslan prosiguió su discurso de la siguiente manera: «La situación actual en Mesopotamia y Oriente Próximo, cuna de civilizaciones, es desgraciadamente de guerra, terror y caos. Los acontecimientos en la geografía de Oriente Próximo y en Siria, Líbano, Israel y Palestina en particular en el último año han revelado claramente una vez más que la única forma de salir de esta situación caótica es la realización de un entendimiento de gobernanza que construya la libertad, la igualdad, la democracia y la coexistencia para todos los diferentes pueblos, religiones y creencias. Esto es exactamente lo que los kurdos quieren hacer en el noreste de Siria. Por tanto, en lugar de atacar esta región, Turquía debería reconocerla, respetar la voluntad de la población y solidarizarse con sus habitantes.

El jefe del MIT debería haberse reunido con todos los pueblos

El jefe de la Organización Nacional de Inteligencia turca (MIT) se precipitó a Siria y se reunió con el líder de HTS. Rezó en la Mezquita de los Omeyas, que antes era la Iglesia de Mor Yuhanon. Llamo su atención: era una iglesia, más tarde convertida en mezquita. No es una buena imagen que el jefe de la Organización Nacional de Inteligencia (MIT) vaya a rezar a una mezquita, sobre todo para grabar un vídeo. El Estado no tiene religión, el Estado es laico. Ya que estaban allí, podrían haber ido de la mezquita de los Omeyas a Bab Touma, que está a diez minutos en coche de Damasco, y haber visitado al patriarca asirio ortodoxo, al patriarca griego ortodoxo, al metropolitano armenio y a las instituciones alevíes. Deberían haberse reunido con representantes de todos los pueblos y minorías religiosas del país, no sólo de un grupo de personas; sus demandas deberían tenerse en cuenta y habría que esforzarse por garantizar constitucionalmente sus derechos.

Micrófono apagado

En el resto de su discurso, Aslan celebró la Fiesta de Navidad en siríaco. El presidente del Parlamento del AKP, Bekir Bozdağ, apagó el micrófono en ese momento. El siríaco quedó registrado en el acta con las palabras «…». Aslan dijo: «Ahora, cuando todos leen versículos del Corán, el sistema no se apaga, funciona porque dicen: ‘Esta es una lengua sagrada’. La lengua que acabo de hablar es la lengua que hablaba Jesucristo. Si buscamos la santidad, esta también es una lengua sagrada».