Comunicado del Movimiento de Mujeres Kurdas en Europa (TJK-E) con ocasión del aniversario de los asesinatos en París (2013 y 2022)
Desde 2013 hasta hoy los asesinatos de París no han sido enmendados
¡Llamamos a una exigencia conjunta de justicia!
Sara/Sakîne Cansiz, una de las fundadoras del Movimiento por la Libertad de Kurdistán y pionera del Movimiento de Mujeres Kurdas; Rojbîn/Fîdan Dogan, intérprete de la lucha de los pueblos oprimidos e inspiración internacional; Ronahî/Leyla Şaylemez, militante de un movimiento que sigue manteniéndose joven.
Han pasado once años desde sus asesinatos. Si bien nuestra rabia por esta masacre perpetrada en 2013 sigue viva, y nuestra promesa de llevar a los asesinos ante la justicia mantiene su fuerza, otra tragedia se ha abatido sobre nosotras. Una de las pioneras del Movimiento de Mujeres Kurdas, Evîn Goyî/Emine Kara, el artista Mîr Perwer/Mehmet Şirîn Aydin y nuestro preciado amigo Abdurrahman Kızıl fueron asesinados en París.
La información recopilada de los perfiles, las fechas y la localización de los asesinos no deja duda alguna para que el público kurdo vea claramente que el Estado turco es el autor de ambas masacres. Evîn Goyî, pionera del Movimiento de Mujeres Kurdas, fue acribillada al tiempo que emergía el eslogan universal «Jin Jîyan Azadî».
Al igual que en anteriores ataques contra la diplomacia y la juventud kurdas, este se trata de un ataque selectivo contra la cultura y el arte kurdos, encarnados en Mir Perwer.
La elección de los escenarios en estos atentados planificados muestra el intento de reprimir el despertar de la sociedad kurda y continuar su genocidio.
La conspiración histórica contra el pueblo kurdo continúa, mientras que la justicia francesa ignora la primera masacre de París y la trata como un ‘secreto de Estado’. Un año después del asesinato de Evîn Goyî, Mîr Perwer y Abdurrahman Kızıl, el segundo crimen no es reconocido como asesinato político. El velo del ‘secreto de Estado’ tiene que levantarse y ambos atentados deben ser traspasados a la fiscalía antiterrorista. Nuestra lucha de 11 años es una primicia en la historia de los asesinatos políticos en Francia y ha reforzado aún más nuestra determinación.
Evîn Goyî, impresionante revolucionaria que se caracterizó por su sacrificio y su amor a la patria, resistió en las montañas de Kurdistán durante 34 años.
Mîr Perwer, artista fiel, plasmó el dolor y la determinación kurdos con su melodía y sus palabras «Hemos existido, existimos, existiremos».
Abdurrahman Kızıl, conocido como «Xalo», fue un patriota histórico que, a pesar de ser exiliado y torturado, se aferró inquebrantablemente a sus valores.
El año pasado honramos a los tres amigos, cuyo lugar no se puede llenar con palabras, con un gran serhildan -la resistencia de los pueblos- digno de ellos. Como pueblo kurdo y mujeres kurdas que llenaron las calles de París el día de su masacre, hemos hecho una promesa.
Al igual que en la primera masacre, hemos prometido: «No olvidaremos, no nos acostumbraremos a estos crímenes y haremos que rindan cuentas».
Todos en este mundo deben saber:
‘NO DEJAMOS LA JUSTICIA A SU MERCED’
Nosotros, como pueblo kurdo y mujeres kurdas, tenemos una historia que ha sido puesta a prueba por dificultades, caracterizada por el dolor y ligada a grandes sacrificios; por lo tanto, no dejaremos la justicia a merced de ningún poder, gobierno o ley estatal. Esto lo aprendimos primero de la postura erguida de Sara, que escupió en la cara a los verdugos, y de la lucha sin aliento de Evîn Goyî, que no conoce obstáculos.