Hakkari 2023: vivir en una cárcel a cielo abierto
ANF – 23 diciembre 2023 – Traducido y editado por Rojava Azadi Madrid
El estado de excepción viene aplicándose en la región de Hakkari (Bakur, Kurdistán norte, Turquía) ininterrumpidamente desde hace 7 años. El año 2023 ha estado marcado por graves violaciones de los derechos humanos y prohibiciones arbitrarias. Las leyes vigentes han quedado suspendidas y la población vive literalmente en una prisión a cielo abierto.
Hakkari (Colemêrg) lleva 7 años bajo estado de excepción. En 2023 han continuado sin interrupción las torturas, detenciones, encarcelamientos, ejecuciones extrajudiciales y prácticas de guerra especiales. Se cerraron las puertas fronterizas y se ha prohibido a la población comerciar. Mesetas y pastos han sido declarados «Zona Especial de Seguridad» y se intenta acabar con la agricultura y la ganadería. Se han establecido decenas de puestos de control en la autopista Van-Hakkari e incluso se ha impedido viajar. Hay una base militar en cada colina que rodea la ciudad, y el centro está prácticamente bajo bloqueo militar y policial.
En los últimos 7 años se han prohibido todas las protestas y actos, emitiéndose nuevas órdenes de prohibición cada 15 días. Los partidos políticos u organizaciones de la sociedad civil distintos del AKP-MHP tienen que «obtener permiso» cuando quieren llevar a cabo cualquier acción o actividad. Quince personas murieron, arrolladas por vehículos blindados y por el fuego abierto por soldados y policías en la frontera. Los registros domiciliarios, la violencia bajo custodia y las detenciones son rutina.
Aplicación del embargo económico
La mayoría de las mesetas y valles, importantes para la agricultura y la ganadería, se ha prohibido su utilización, quedando cerrados a la población tras ser declarados «Zona Especial de Seguridad». Esto afecta gravemente a la población, ya que la ganadería y la agricultura son su principal fuente de ingresos. Debido a las restricciones, los aldeanos que no han podido llevar sus animales a los pastos han tenido que abandonar la ganadería y emigrar. Los ciudadanos que no han podido cultivar sus campos y huertos, no han podido producir nada, por lo que han sufrido fuertes crisis económicas.
El Estado turco ha asesinado a muchos ciudadanos que querían hacer negocios en las zonas rurales y fronterizas. También ha intentado reprimir a los comerciantes impidiendo el comercio en las puertas fronterizas de los distritos de Gever y Çelê.
Muchos ciudadanos han muerto o resultado heridos como consecuencia del fuego abierto por soldados y policías cuando iban a sus campos, a pastar a sus animales o incluso cuando iban de picnic con sus familias.
Aumento de los casos de suicidio
Hakkari ha experimentado el periodo con el mayor número de casos de suicidio en 2023. Hakkari tiene la población más joven, pero ocupa el primer lugar en cuanto a desempleo y pobreza. Según la Asociación de Derechos Humanos (IHD), hubo 25 intentos de suicidio en 10 meses y 12 personas lo lograron. Los que se suicidaron eran hombres y mujeres jóvenes de entre 17 y 30 años.
La IHD afirma en un informe que «se ha demostrado que personas, incluidos agentes de la ley, han abusado sexualmente de algunas mujeres. Las muertes de algunas de las mujeres que sufrieron abusos sexuales se trataron como «suicidios» cuando eran muertes sospechosas.»
