El desmoronamiento del Kurdistán Iraquí

Fue presentado como el  paradigma del éxito total. Se nos decía que en medio de un Oriente Medio destruido, lleno de fatalidad, dolor y muerte, era un solar donde abundaba la leche y la miel, algo así como la antorcha de la esperanza o ¿acaso era un pastel delicioso lleno de putrefacción?

Este lugar “excepcional” se llama Kurdistán de Irak y más concretamente Gobierno Regional Kurdo (KRG). Es el sitio donde el capitalismo global inyectaba”inversiones masivas” mientras que Occidente “garantizaba la seguridad y la paz”.

Las empresas turcas construían y financiaban un montón de proyectos mientras que su flota de camiones cisternas y más tarde un oleoducto,transferían cantidades ingentes de petróleo hacia Occidente.

En el aeropuerto de Erbil, hombres de negocios europeos, soldados y expertos en seguridad se codeaban con especialistas en desarrollo de la ONU. Varias compañías aéreas entre ellas Lufthansa, Austrian Airlines,  Turkish Airlines, Mea y otras tantas desplegaban vuelos hacia ese nuevo centro  neurálgico “chic” del Oriente Medio.

No se preocupen si el gobierno del KRG sigue enfrentado a Bagdad en lo que respecta a las reservas de petróleo, la amplitud de su autonomía está repleta de otras cuestiones esenciales.

No se preocupen tampoco si los indicadores macro-económicos revelan de repente un contraste inmenso con la miseria creciente de la población local.

Mientras fluía el petróleo esta región auto-administrada juraba obediencia eterna a Occidente, después la economía se ha resentido para al final hundirse totalmente y entonces todos los indicadores sociales se han derrumbado. La felicidad de los inversores occidentales y turcos y más concretamente la de los manipuladores políticos se  vuelve cada vez más insultante  para los que trabajan duramente para poder llegar a subsistir económicamente.

El día de mi partida, el 9 de Febrero pasado, el Kurdistán iraquí se había fragmentado en una serie de protestas violentas debido a las medidas de austeridad para evitar el desmoronamiento  económico.

Al respecto, la agencia de noticias Reuters informó de lo siguiente:

“Las protestas se han intensificado este martes en la región del Kurdistán iraquí. El  “boom”económico en esta zona autónoma se frenó repentinamente  en el año 2014, cuando Bagdad redujo drásticamente los subsidios para la construcción del oleoducto hacia Turquía, a través del cual el KRG inició la exportación de petróleo. La consecuencia para el ente autónomo kurdo es que se ha visto obligado a arreglárselas para pagar los sueldos de sus funcionarios, que alcanzaban el monto de 721.000€ mensuales. El KRG intentó colmar el déficit aumentando las ventas de petróleo hasta alcanzar la cifra de 600.000 barriles diarios pero teniendo en cuenta los precios actuales del oro negro, el KRG se ha quedado con un déficit mensual de  646.000 €. Sin embargo el conflicto con Bagdad y el déficit financiero no constituyen los únicos problemas que han conducido a la situación actual. La política social del KRG lleva mucho tiempo siendo totalmente insuficiente ya que la ayuda social a la población local nunca ha sido considerada como una prioridad”.

Una noche, me encontré con una especialista en educación de la ONU, la señora Eszter Szucs, radicada en Erbil. Tuvimos un encuentro corto pero intenso. Ella me manifestó lo siguiente:

«El Kurdistán iraquí definitivamente  no es un estado social. La gente está muy descontenta con la situación actual. Protestan mucho pero no obtienen muchos resultados. Los recursos naturales están privatizados, los servicios sociales en su mayoría son muy caros así que los que se lo pueden permitir van a tratarse a Turquía. La zona es un lugar muy complejo”.

Realicé la siguiente pregunta:

¿Podríamos estar hablando de un paraíso en llamas en el corazón del Oriente Medio?
“En absoluto, contestó ella, existen inversores procedentes del extranjero, fundamentalmente de Turquía y de Occidente pero dichas inversiones están dirigidas hacia el crecimiento macroeconómico, concretamente el sector petroquímico, muy poco revierte a la población local”.

Por mi parte, ya conocía el “tema” ya que tuve la oportunidad  de ver gente “normal” cocinar raíces para cenar, justo al lado de las refinerías de la KAR, la compañía petrolífera kurda.

El 9 de Febrero pasado, las manifestaciones llenaron las calles de Suleymaniye, Koya, Halabja y Chenchemal, ya estaba muy claro que el supuesto “milagro” económico del Kurdistán iraquí se estaba derrumbando como un castillo de naipes. La situación no hace más que agravarse y todo va a pique.

Mientras íbamos por la carretera que une Erbil con Mosul, le pregunté a mi intérprete lo siguiente:

¿Porque cree que no hay fondos para pagar los sueldos, jubilaciones, sin mencionar a las nóminas de los Peshmergas?
-No hay dinero porque el precio del petróleo se ha derrumbado y luego está la guerra contra Daech. Antes, Bagdad cubría el 75 % de los servicios sociales para nuestra gente…ahora no manda nada.

Le volví a formular la siguiente pregunta:

¿Por qué tendría que  enviar dinero si en el fondo os sentís más próximos a Washington? Jurais obediencia eterna a Occidente e incluso amenazáis con declarar la independencia, y por si fuera poco habéis  construido un oleoducto hacia Turquía?”
“Sí, pero Bagdad sigue siendo nuestra capital”.

Ya, pero queréis romper lazos con Irak y con el resto del Oriente Medio”
Silencio.

Volví a la carga:

¿Acaso obtenéis  alguna ayuda ,algún dinero de EE.UU.?
-“No”.

¿Se podría decir que el pueblo kurdo está decepcionado porque no obtiene ayuda alguna de Occidente?
-“Sí, efectivamente, muy decepcionados. Nos sentimos poco seguros en nuestro propio país, sobre todo últimamente. Todo puede ir a pique de un momento a otro. La gente quiere irse de aquí, desea emigrar a EE.UU o al Reino Unido.”

¿Considera que  se ha terminado la euforia?
La carretera por la cual transitamos está plagada de escombros, tendidos eléctricos y grandes vallas. La tierra está sin cultivar, prácticamente no existe la agricultura. Todo está basado en la  extracción petrolífera y en las bases militares, imperan la inactividad y la apatía.

Nuestro vehículo se tiene que detener en uno de los muchos controles. Mi compañera se ve acosada porque tiene un visado iraní en su pasaporte y yo tengo uno de Siria en el mío. Mientras nuestros documentos son examinados con lupa, camiones turcos pasan sin ningún tipo de problemas ya que gozan de privilegios no explícitos pero evidentes.

Al sur de Erbil, cerca de Qushtapa, la carretera está plagada de camiones turcos y kurdos. En esta vía que une Irak con Turquía e Irán, parece que hay más camiones que coches o autobuses normales.Todo ello tiene que ver con el “comercio” ya que las personas apenas viajan.

Hace unos días, ciudadanos enfurecidos bloquearon la carretera, exigiendo un cambio en la política social, instando al gobierno regional (KRG) a tomar medidas.

Llegamos por fin al pueblo de Degala. La policía y los lugareños recelan de nuestra presencia.

-¿A que se debe el motivo de la protesta?, pregunto.
Al principio intentan desvíar la pregunta:
“Queremos que arreglen la carretera”, contesta uno de ellos.

-¿Ah sí, de verdad?
Pasado un momento, se “rompe el hielo” y otro empieza a hablar:
“Durante más de 6 meses no nos han pagado, sin embargo vemos  que en esta carretera hay comercio, por lo tanto dinero, pero nosotros no recibimos absolutamente nada, por eso estamos protestando. Los camiones transportan petróleo y alimentos pero no se detienen aquí. Nos han abandonado.”

Durante nuestro viaje a Erbil, constato el abandono total: los campos no están cultivados, la economía no está diversificada.

Le pregunto a nuestro conductor lo siguiente:

¿Siempre ha sido así? ¿Cuando estaba S.Hussein, Kurdistán producía alimentos o no? ¿Existía la agricultura?
“Sí, responde encogiéndose de hombros. Era… como un país diferente”.

-¿Mejor o peor?, le pregunto.
“Sí, bastante mejor…. Y ahora además existe una guerra, explica”.

Hace un año había conseguido llegar a la línea de frente, justo a 7 kms de Mosul. Me enseñaron las colinas que estaban en poder del Daech, pude ver el puente destruido sobre el río Khazer, luego los pueblos de Sharkan, Hasan Shami y otras poblaciones bombardeadas y destruidas por las fuerzas de la coalición internacional.

El comandante del batallón, el coronel Shaukat, perteneciente a la fuerza militarizada (Peshmerga) de Zeramani me atendió en su vehículo 4×4 blindado  con el fin de dar una vuelta.

Le pregunté lo siguiente:

-¿Cuantos civiles han muerto en este pueblo?
“Ninguno, replica. ¡Lo juro, de verdad! Nosotros hemos facilitado muy buena información para que la fuerza áerea de EE.UU conociesen los objetivos que tenían que alcanzar.”

Tal vez se pensaba que nunca jamás había cubierto un conflicto armado. Centenares de civiles murieron. Era evidente y por si fuera poco, así me lo confirmaron más tarde familiares de las víctimas. Casi no  quedaba nada de esos pueblos, a decir verdad casi todos habían desaparecido del mapa. El coronel Shaukat había sido formado en el Reino Unido y por lo tanto sabía muy bien lo que tenía que decir y no decir.

Esta vez me dirijo  al director del hotel Rostana de 5 estrellas en Erbil.

–“Yo soy iraquí,de Mosul”,replica. “Perdí a mi hermano y a mi tío cuando Mosul fue conquistada por los yihadistas .Evidentemente que el Daech ha sido creado y apoyado por Occidente y Turquía, pero de igual manera critico al éjercito iraquí, concretamente a 54.000 hombres que arrojaron sus armas y huyeron.”

Yo le dijé lo siguiente:

Probablemente sospecharon que detrás del Daech estaba la OTAN.
–“Es probable”, respondió.

-Entonces, que nos puede decir de Rusia?
“Realmente estoy muy interesado en lo que hace Rusia actualmente en el Oriente Medio. Rusia, sí lucha contra Daech, mientras que EE.UUviene, bombardea posiciones tomadas por Daech,matando sobre todo a civiles y por si fuera poco a veces cuando lanzan armamento éste cae fácilmente en manos de los yihadistas. Yo tengo muchos amigos en Mosul que de verdad luchan contra ellos y por lo tanto, estoy bien informado..Las familias que están en ambos lados de la línea del frente y los móviles funcionan ,por lo tanto es muy fácil enterarse de la situación actual en Mosul, basta con llamar a algún familiar o amigo”.

Luego el director del hotel agrega lo siguiente:
“Incluso si Mosul  llegase a ser liberada, habría un montón de facciones y los conflictos serían eternos”.

-O sea algo parecido a lo que existe en Libia.
– “Sí, algo similar, además me preocupa mucho lo que ocurre con los niños en Mosul ya que los adoctrinan de manera durísima”.

Por mi parte,añado lo siguiente:
–Eso ocurre en muchos países que han sido desestabilizados por Occidente.

El director de hotel no responde. Tan solo sabe lo que ocurre en su ciudad natal y en su país.

De vuelta al hotel, un británico habla de política con una recepcionista. Hablar de temas militares y de producción petrolífera está de moda entre la clase dominante local y los expatriados machistas. Hay un montón de expertos en seguridad privada ,militar, instructores ,servicios de información y consejeros, lo cual constituye toda una mezcla de militarismo adobado con dogmas “hiper-capitalistas”.

Me fijo en las fuentes locales y cada vez que lo hago es evidente que las cosas van a peor.
El director de Estadística en Suleymaniye, Mahmud Osman declaró recientemente a BasNews:
“Comparado  con el 2014, los gastos de cada familia en el 2015 han disminuido el 30%, mientras que el índice de paro que era del 7% en en 2013 , ahora alcanza el 25%…”

El empobrecimiento crece también de forma alarmante. El KRG posee métodos muy  laxos para evaluar el empobrecimiento.

Si una familia gasta más de 105.000 dinares iraquíes, o sea 78€ al mes, esa familia es considerada pobre o sea que corresponde a 20 € por persona al mes, 0.90€ diarios. Se debe de tener en cuenta que las familias kurdas están constituidas por 4 miembros como mínimo.

Le pregunto a nuestro chófer cuánto necesita una familia de 5 miembros para subsistir en Erbil.
–“Como mínimo, 900€ mensuales, fuera de la capital unos 540€ mensuales.”

–¿Cuantas familias ganan esta cantidad?
–“Ni la mitad, mucho menos que la mitad” contesta.

Estoy desconcertado: quiero averiguar a través de la población local si realmente el nivel de vida se ha hundido o no.

En el pueblo de Kawergosk, un hombre mayor, Mohamed Ahmed Hassan, contesta fríamente acerca de la situación actual:
“No nos ayudan para nada (el gobierno) y ahora no poseemos nada. ¿Ves esta refinería de petróleo? Nos han abandonado, no hay trabajo y tenemos que subsistir como podemos”.

En otro pueblo hablo con una de las varias familias que han conseguido escaparse de los territorios ocupados por Daech. Vienen de la ciudad de Hammam Al Alil, cerca de Mosul. Todos están de acuerdo que las cosas iban mejor antes de la invasión norteamericana.
“Cuando Saddam Hussein estaba en el poder,  Irak era un país decente y respetado. No había problemas de seguridad, ahora no sabemos quiénes son nuestros enemigos y quién está detrás de ellos”.

En un pueblo cercano, una mujer me habla de su propia situación. Según la cultura muy conservadora propia de la comarca de Mosul , oficialmente no tendría que dirigirse a nosotros, sin embargo declara que: “tiene varios hijos, todos hambrientos, está desesperada”. 

Prosigue diciendo lo siguiente:
“Nuestros hombres están con los Peshmergas, combatiendo contra Daech. Tengo 7 hijos, igual que mi vecina. Ahora nadie  trabaja, no recibimos ningún tipo de ayuda, incluso los propios peshmergas no reciben sus sueldos.Todo se ha vuelto terriblemente difícil y no sé cómo vamos a poder subsistir”.

Los camiones-cisternas turcos siguen circulando, día y noche sin parar.

Hace unos días, durante un encuentro en Istanbul, el profesor Ahmet Tomak, resumió la situación entre Turquía y el KRG de la siguiente forma:
“Turquía apoya mucho al régimen de Erbil, sobre todo por motivos económicos. Todo aquel que se traslade allí puede darse cuenta de que las empresas turcas dominan casi todo, claro, hay petróleo pero igualmente existe un factor político: el KRG es la única fuerza kurda en la zona que mantiene relaciones amistosas con Ankara”.

A pesar de todo, los aliados del KRG no parecen demasiado preocupados por la situación por la cual está pasando la población local.

Mientras el sistema social se desmorona,Erbil se transforma en uno de los lugares más “chic” del planeta: carreteras de 12 carriles ,comunidades fragmentadas, ningún tipo de transporte público, ausencia casi total de centros culturales, sin embargo abundancia de centros comerciales para ricos, así como hoteles de lujo para expatriados.

En un lugar donde la mayoría de las personas subsisten con 1 dólar diario, una habitación en un hotel cuesta actualmente unos 315€, y el alquiler de un coche junto con una habitación cuesta más de 360€ diarios.

Se palpa el temor en la zona y ese temor engendra la ira y esta última puede llevar a la violencia contra el régimen  corrupto y pro-occidental.

Veamos lo que propone Erbil. Reuters informó el 11 de Febrero de lo siguiente:
“Massud Barzani , presidente de facto del KRG ha declarado a principios de ese mes que ya había llegado el momento para los kurdos de Irak de proclamar un referéndum sobre la independencia.”

Bagdad observa y advierte:
“No lo hagaís! No vais a poder subsistir sin nosotros.”

Todo lleva a creer que el KRG desea proseguir con esta vía y como en todas las colonias de Occidente, la ganancia está muy por encima de los deseos del pueblo.

Publicado por Russia Today y traducido por Newrozeke