Análisis

Los casos de COVID-19 se incrementan rápidamente en el NE de Siria


La elevada población de desplazados y el aislamiento de la región autónoma dirigida por los kurdos, tras el cierre de un paso fronterizo por parte de las Naciones Unidas, contribuyen a la propagación del virus.

Al-Monitor – 28/08/2020 – Traducido por Rojava Azadi Madrid

Un hombre sirio pasa en motocicleta junto a un mural pintado como parte de una campaña de sensibilización de la iniciativa del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la que se dan instrucciones para protegerse de COVID-19, en la ciudad de Qamishli, de mayoría kurda, de la provincia nororiental de Hasakeh en Siria, el 16 de agosto de 2020, tras un aumento de las infecciones en la zona. Foto de DELIL SOULEIMAN/AFP vía Getty Images.

Los casos de COVID-19 están aumentando rápidamente en el noreste de Siria. La región, devastada por la guerra, es susceptible de sufrir un brote debido a los efectos de los recientes conflictos y al cierre de un paso de ayuda desde enero.
Los casos de coronavirus han aumentado significativamente en agosto en el noreste de Siria. Hubo un total de 327 casos en el área hasta el 21 de agosto, según un informe del Centro de Información de Rojava (RIC), con sede en Qamishli. Esto incluye un aumento de 145 casos en esa semana. Hubo al menos 300 nuevos casos en tres semanas, dijo el RIC el 24 de agosto, mostrando que la mayoría de los casos confirmados en la región son recientes.
El Comité Internacional de Rescate, una organización humanitaria no gubernamental que opera en el noreste de Siria, dijo el jueves que los casos de COVID-19 han aumentado un 1.000% en agosto, en un comunicado enviado a Al-Monitor. Ese mismo día, un portavoz de la organización indicó que hay 425 casos confirmados en el noreste de Siria.
En un comunicado enviado a Al-Monitor, Médicos Sin Fronteras dijo que una quinta parte de los infectados son trabajadores del área sanitaria.
El noreste de Siria está gobernado por la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria. La zona opera de forma independiente de Damasco y está dirigida por el partido político kurdo, el Partido de la Unión Democrática. En la administración participan también otros grupos cristianos y árabes, así como las Fuerzas Democráticas Sirias respaldadas por los Estados Unidos que luchan contra el Estado Islámico (IS).
El conflicto y el aislamiento político hacen que el noreste de Siria sea vulnerable a un brote de virus. La guerra de años con el IS dañó la infraestructura sanitaria, al igual que la incursión turca de 2019 en la zona, que desplazó a cientos de miles de personas. Muchas personas siguen desplazadas por los recientes conflictos, entre ellas más de 60.000 mujeres y niños afiliados al IS en el campamento de al-Hol. Algunos trabajadores de la salud dieron positivo por el virus en el abarrotado campamento, que tiene problemas de acceso al agua este mes.
La situación se complica aún más por el cierre -en el mes de enero- del cruce de Yaroubiyah desde Irak hacia el noreste de Siria, ordenado por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Rusia y China, que respaldan al gobierno sirio, quieren que la ayuda pase por Damasco. El gobierno sirio no reconoce plenamente a las autoridades del noreste de Siria, lo que dificulta que los agentes humanitarios entreguen la ayuda directamente.
El Comité Internacional de Rescate, o IRC, dijo que el cierre está perjudicando significativamente la asistencia sanitaria en el noreste de Siria.
«El IRC ya ha visto los devastadores impactos de la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU de poner fuera de uso el cruce de Yaroubiya: grave interrupción de los servicios y cierre de instalaciones de salud, escasez crítica de medicamentos», dijo la organización en su declaración, citando también la falta de equipos de protección personal y de camas en la unidad de cuidados intensivos.
La falta de pruebas adecuadas podría significar que hay más casos de los que se han detectado.
«Esto es motivo de preocupación respecto a una propagación oculta, y mucho más amplia, en algunas de las partes más vulnerables en el noreste del país, especialmente entre los civiles desplazados o con necesidades humanitarias», dijo el IRC.
Médicos sin Fronteras informó que las limitadas pruebas en el noreste de Siria muestran una tasa positiva de alrededor del 50%.
«Las pruebas son limitadas, pero de las pruebas realizadas, alrededor de la mitad dan un resultado positivo», dijo la organización el jueves. «Esto sugiere que las tasas de transmisión son altas y que se necesitan muchas más pruebas».
Turquía, que está en conflicto con los grupos kurdos del noreste de Siria, cortó el suministro de agua a la región este mes. El agua es necesaria para las prácticas de higiene que combaten la propagación del virus.
Los funcionarios de la administración autónoma están tratando de mitigar la propagación del virus. El uso de mascarilla es obligatorio y las reuniones públicas están prohibidas. Las escuelas de la región tienen clases online desde principios de este año.
La contención sigue siendo difícil. En su informe del 21 de agosto, el RIC dijo que el rastreo de contactos se detuvo en la región de Jazira debido a «una propagación incontrolable».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies