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Las fuerzas turcas intensifican los bombardeos en el Kurdistán iraquí: aldeas atacadas, incendios provocados

Medya News – 5 julio 2024 – Traducido y editado por Rojava Azadi Madrid

Turquía intensifica su incursión militar en la Región del Kurdistán de Irak (KRG), los informes indican efectos generalizados desde la región de Slemani Penjwen, en el este, hasta el punto más occidental de Metina.

La presencia militar turca en la gobernación de Amedi (Amêdî) Duhok, en el Kurdistán iraquí, se ha intensificado en los últimos días, con la entrada en la zona de decenas de vehículos blindados bajo la supervisión del Partido Democrático de Kurdistán (PDK). Los informes del 4 de julio indican que fuerzas turcas, incluidos vehículos blindados y tanques, entraron en Amedi hacia las 2 de la madrugada, hora local.

Desde el 22 de junio, cientos de vehículos blindados, tanques y tropas turcas se han desplegado, estableciendo puestos de control e intentando evacuar los pueblos de la zona.

Fuentes locales afirman que los incendios de la zona fueron provocados por soldados turcos, acusaciones negadas por el Ministerio de Defensa turco, que atribuye los incendios a combatientes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

El 30 de junio, la localidad de Miska, conocida por albergar la iglesia más antigua de la región, con su característico tejado rojo, fue objeto de un intenso bombardeo. Los medios de comunicación locales confirmaron el ataque, que supuso una escalada significativa del conflicto. Además, el pueblo de Dargale fue evacuado por orden del ejército turco, con un plazo de 24 horas, bajo la amenaza de nuevos bombardeos.

Los residentes han informado de que las fuerzas turcas han estado controlando los documentos de identidad y restringiendo los movimientos.

La presencia del ejército turco en la región iraquí de Kurdistán no es nueva. Los datos históricos muestran que el despliegue del ejército turco en la región se ha intensificado a lo largo de los años. Fuentes de la región, incluidos informes de los medios de comunicación y expertos locales, sugieren que Turquía avanza hacia la ocupación de una parte significativa del Kurdistán iraquí.

Desde 2022, las operaciones militares de Turquía en la zona forman parte de una estrategia más amplia para contrarrestar la presencia del PKK. Según un informe publicado por el Canal 8 de Sulaymaniyah (Silêmanî), el ejército turco ha desplegado alrededor de 300 tanques y vehículos blindados, posicionándolos en aldeas alrededor de la cordillera de Metina y la región de Bamerni de Duhok.

La fase actual de las operaciones parece estar dirigida a establecer una zona tampón de seguridad desde la región de Shiladzi hasta la ciudad de Batufa. Esta zona tampón pretende cortar el enlace entre los combatientes del PKK y otras zonas del sureste de Turquía de mayoría kurda (Bakur). Según fuentes locales, la presencia militar turca en la zona es de entre 600 y 900 soldados.

En los últimos dos meses, los residentes de la gobernación de Duhok han sido testigos de un aumento constante del despliegue de tropas y armamento pesado turcos. Las recientes ofensivas se han centrado en tomar el control de las bases del PKK en la cordillera de Metina, con operaciones que abarcan un tramo de 20 kilómetros. Los analistas militares creen que el objetivo final de Turquía es hacerse con el control de las montañas de Gare, lo que podría provocar que el Gobierno Regional de Kurdistán perdiera el control de una parte significativa de su territorio en Duhok.

Sarteep Jawhar, experto en seguridad en asuntos kurdo-iraquíes, destacó los esfuerzos militares y diplomáticos simultáneos de Turquía. A pesar de los continuos ataques desde 2022, Turquía no ha logrado sus objetivos. Sin embargo, los recientes refuerzos han hecho que cientos de soldados establezcan posiciones y puestos de control en las zonas de Barwari Bala. Hay indicios políticos de que las incursiones podrían extenderse a la región de Sulaymaniyah, y se espera que una delegación turca de alto nivel visite Bagdad para presionar a la Unión Patriótica de Kurdistán (PUK) para que se una a la alianza PDK-Turquía.

Tevgeri Azadi (Movimiento por la Libertad) emitió una declaración llamando a la resistencia contra la agresión turca. La declaración condenaba las acciones de Turquía como una violación del derecho internacional y un ataque a la soberanía iraquí, y criticaba la falta de respuesta del gobierno federal iraquí y la cooperación de la familia Barzani con el ejército turco.

A pesar de la amplia censura informativa, fuentes locales informan de que el ejército turco ha establecido más de 110 bases militares en la región, y que las recientes ofensivas han causado numerosas bajas y la necesidad de evacuar a los heridos en helicóptero.

Rudaw TV informa de que, desde principios de año hasta el mes pasado, el ejército turco llevó a cabo 833 ataques aéreos y de artillería contra la región de Kurdistán, que causaron la muerte de ocho civiles. La Unión de Comunidades del Kurdistán (KCK) ha advertido de que la ocupación turca podría convertirse en permanente y ha pedido una respuesta unificada para proteger el futuro de las comunidades iraquíes. A medida que se intensifican las tensiones, la situación sigue siendo volátil, con importantes repercusiones para la estabilidad y la seguridad de la región.

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