Kawa el herrero, símbolo de la resistencia kurda
Fuente: AFP | Ekurd.net
Fecha: 20 de marzo de 2018
Traducido por Rojava Azadi
Milicianos sirios apoyados por Turquía destruyen la estatua kurda de «Kawa” en el centro de Afrin, Kurdistán (Rojava) el 18 de marzo 2018. Foto: Reuters
QAMISHLO, Kurdistán sirio – En la ciudad kurda de Efrin, dentro del Kurdistán sirio (Rojava), el pasado lunes, la estatua de un famoso héroe kurdo colgaba maltrecha y arrancada en parte de su pedestal un día después de que las fuerzas lideradas por Turquía invadieran la ciudad.
Los kurdos han reaccionado con indignación después de que los combatientes pro-Ankara destruyeran el domingo la estatua del herrero Kawa, lo han calificado de ofensa a su pueblo.
Pero, ¿quién es esta figura mítica y qué representa?
¿QUIÉN ES KAWA?
Símbolo de la resistencia, Kawa fue un héroe kurdo, famoso por haber encabezado una revuelta contra un rey asesino.
Varios pueblos, entre ellos los kurdos de Siria, cuentan su historia desde hace siglos incorporándole sus propios detalles. Ésta es una versión:
Había una vez un herrero llamado Kawa que vivía en una ciudad gobernada por un malvado rey. El déspota estaba enfermo y un médico le dijo que el único remedio era comer, una vez al día, el cerebro fresco de dos niños.
El monarca llevaba a cabo asesinatos a diario por toda la ciudad hasta que un día Kawa tramó un plan. Trabajó infatigablemente en su horno y fundió espadas suficientes para un levantamiento.
En las montañas a las afueras de la ciudad, el herrero reunió a todos los jóvenes y los armó con las espadas. Cuando Kawa dio la señal, encendiendo una hoguera, atacaron el palacio del malvado rey y le prendieron fuego.
LIBERTAD
Aparte de los relatos sobre su rebelión, el nombre de Kawa también aparece en canciones kurdas.
Según la tradición kurda, Kawa representa «trabajo duro, racionalidad, libertad, emancipación de la esclavitud, levantamiento contra la opresión», dice Faris Othman, un investigador de la historia del pueblo kurdo residente en Qamishlo.
«Los combatientes que han derribado la estatua de Kawa en Efrin han cometido una agresión contra todo lo que él simboliza», afirma el escritor.
Representa «el retorno al autoritarismo, la ignorancia y la opresión».
Las fuerzas turcas y los combatientes apoyados por Ankara destruyeron la estatua de Kawa en el centro de la ciudad kurda de Efrin en el Kurdistán sirio (Rojava), el 18 de marzo de 2018. Foto: DHA/AP
VÍSPERA DE UNA FIESTA
Las imágenes de la estatua de Kawa destruida fueron ampliamente difundidas en las redes sociales mientras los kurdos de Siria se preparaban para celebrar el 21 de marzo, nuevo año kurdo.
La fiesta de Nowruz está directamente relacionada con Kawa, cuya revuelta contra el tirano es símbolo de nuevos comienzos, como lo es la celebración anual del inicio de la primavera.
Durante la fiesta, los kurdos visten ropas tradicionales con muchos adornos y encienden hogueras, tal como hizo el herrero.
ESTATUAS DESTRUIDAS
La de Kawa es una de las diversas estatuas que han sido derribadas de forma infame por los yihadistas desde el inicio de la guerra de Siria hace siete años.
En 2013, los combatientes decapitaron la estatua de Abu al-Alaa al-Maari, poeta y filósofo de la era abasí.
No está claro quiénes fueron los vándalos, pero los habitantes de la ciudad noroccidental de Maaret al-Numan culparon al entonces socio sirio de Al Qaeda, el Frente Al Nusra.
Según varios informes, en 2015, combatientes de Al-Nusra destruyeron también una estatua del icono nacional sirio Ibrahim Hanano en la ciudad de Idlib.
En Siria y la vecina Irak, yihadistas del Estado Islámico han atacado repetidamente representaciones del cuerpo humano, llamándolas «ídolos».